Bien, ayer pude realizar algo que esperaba con ilusión: La maratón por Banyoles-Lladó-Albanyá-Bassegoda-Mare de Deu del Mont-Sadernes-Maiá y regreso, con tracks que había preparado Armand sumando tracks del centro Btt (como el 2 con varios de diferentes autores además de dibujarlos para unirlos.
La previsión era de realizar 115 kms. con un desnivel de 2800 mts., pero con el añadido de no conocer el terreno. Era una ruta prevista el 10 horas, para empezar a las 7 y acabar a las 18.00 horas con alguna parada. EL día elegido, el Domingo.
Tras un Sábado con el tiempo mejorando y chubascos ocasionales, suena el despertador a las 6.30 para al final, ver como a las 7 (hora prevista de salida) una tormenta deja caer lluvia abundante. Volvemos a "descansar" hasta que a las 8.15 decidimos salir.
Con temperatura agradable, y el Camelbak a reventar (5 o 6 kgs. de agua y trastos) empezamos rodeando el Lago de Banyoles y nos dirigimos a Lladó por caminos agradables sin tener especiales problemas con el barro. Los primeros 30 kms. son un trámite, un calentamiento que hacemos a ritmo conservador, moviéndonos entre los 50 y 275 metros de altura.
De Lladó a Albanyá, los siguientes 30 kms., ya haremos algo diferente: Ascendemos más, subiendo hasta los 560 mts. y volviendo a bajar hasta los 180, pero con un terreno diferente: Ya no vamos por la tierra compactada y arcillosa del Pla de l'Estany. Aquí ciclamos por pedregales, y a veces por fuertes pendientes. En un video puede apreciarse la dificultad de subir uno de ellos.
Además, de camino a Albanyá tendremos dos anécdotas: Traspasar una valla que indicaba propiedad privada (sabiendo por Armand que algún excursionista se había visto obligado a dar media vuelta por la prohibición del propietario), y abajo de todo, con el vadeo de un rio que nos hizo descalzarnos para pasarlo a pié usando las bicis como apoyo. No parecía aconsejable hacer 5 o más horas de ruta empapado.Filmé a Armand pasándolo, y a mí el agua se me llevó la bici haciendo que quedara completamente cubierta de agua. Debe pesar poco.
Y tras dar una ojeada a la información del PR en Albanyá, emprendimos el ascenso al Bassegoda. Más de 1000 mts. del tirón. AL poco, veíamos como pese a seguir la pista que indicaba nuestro destino nos separábamos del track previsto e íbamos cruzando las indicaciones de un PR a todas luces inciclable. Decidimos continuar por la pista.
Otro nuevo elemento nos confundía: Estábamos cada vez más cerca de Sant Martí de Bassegoda pero no nos cuadraba ni el desnivel ni la información que tenía Armand. Por mucha diferencia: ¡más de 300 mts. de desnivel y varios kms.! Al final supimos que una indicación de Bassegoda que dejamos atrás era la Ermita, no la cima ni su base. Ya retomado el track, decidimos subir en sentido contrario al track para coronar. ¡No íbamos a hacer una maratón Banyoles-Bassegoda sin subir al Bassegoda!
Al final, gracias a Armand, pudimos llegar a la pista y finalmente a la carretera. Los kms. de vuelta se hicieron a ritmo muy fuerte, y gracias a que Armand tiró de mí aflojando en lals subidas para darme un respiro llegamos en tiempo récord.
Suerte que rodando Armand es una bestia: No podía levantarme por cometer el error de no querer tomar un antiinflamatorio (siempre llevo Ibuprogeno) y acabé usando casi sólo la pierna derecha.
Curiosamente, todas las subidas, Bassegoda incluido, no parecieron costarme esfuerzo alguno.Quizás por la costumbre de arrastrar la pesada enduro.
Queda pendiente volver para disfrutar del track de Armand, así como ir con la enduro para saborear los senderos del Bassegoda, con tanta piedra y vegetación que me hicieron soñar durante casi toda esa subida.
Al final, 114 kms. en 8 horas 24 minutos , 13,6 kms.h medios, y 2732 mts. ascendidos